Rusia exportó un total de 51,8 toneladas de oro durante el primer trimestre del año, cifra que supera en un 72% la exportada durante el mismo periodo del año pasado. La decisión del Banco Central de la Federación Rusa de dejar de aumentar sus reservas de oro ha sido fundamental para que la industria local disponga de más oro para vender en el exterior.
Los últimos datos publicados por el Servicio Federal de Aduanas de Rusia revelan que las exportaciones de oro desde este país se han elevado un 72% interanual, hasta las 51,8 toneladas en el primer trimestre del año. Una cantidad de oro que, a precios actuales, está valorada en más de 3.000 millones de dólares.
Solo en el mes de marzo, las exportaciones se elevaron hasta las 26,5 toneladas de oro, por un valor cercano a 1.500 millones de dólares y unas 2,3 veces más que en el mes de febrero.
El mayor comprador de oro procedente de Rusia sigue siendo el Reino Unido, que adquirió 21,1 toneladas por 1.200 millones de dólares, debido a que Londres es uno de los principales centros mundiales de comercio de metal precioso.
Otros compradores de oro ruso fueron Turquía, la India, Kazajistán, Suiza (otro centro mundial de comercio de oro), Armenia y Bielorrusia.
En abril del año pasado, el Banco Central de la Federación Rusia decidió detener sus compras de oro de producción local para aumentar sus reservas, tras más de una década haciéndolo. El final de su plan estratégico o la reducción de los ingresos derivados de la venta del petróleo fueron algunas de las posibles explicaciones que se manejaron en ese momento.
En cualquier caso, la decisión permitió liberar una importante cantidad de oro (Rusia es el tercer mayor productor mundial, a punto de superar a Australia en el segundo puesto), que la industria minera rusa está vendiendo al exterior.
La decisión del Banco Central de la Federación Rusa de congelar la compra de oro para sus reservas sigue estando vigente, según ha confirmado recientemente la vicegobernadora de este organismo, Ksenia Yudaeva: “ahora mismo no lo contemplamos. Si vemos la necesidad de volver a comprar oro y tomamos cualquier decisión al respecto, informaremos al mercado. Pero por ahora, no vemos que sea necesario”.