El Banco de Nova Scotia (Scotiabank) ha accedido a pagar una multa de 127,5 millones de dólares para cerrar la investigación que lo ha hallado culpable de manipulación de los mercados de metales preciosos. Traders de la entidad habían manipulado los mercados del oro y la plata, y el banco había tratado de obstaculizar la investigación.
Scotiabank ha llegado a un acuerdo con el Departamento de Justicia estadounidense y con la Commodity Futures Trading Commission (CFTC) y ha accedido a pagar una multa de 127,5 millones de dólares para resolver las acusaciones de manipulación de los mercados de metales preciosos.
El banco tendrá que nombrar también un auditor independiente que revise el buen gobierno de la entidad.
Scotiabank había sido acusado de no haber detectado y detenido la actividad de varios traders, que estaban realizando operaciones falsas, destinadas específicamente a manipular los precios en los mercados de futuros del oro y la plata.
En concreto, se trata de la actividad prohibida denominada ‘spoofing’, que consiste en la emisión de órdenes de compra o venta falsas, que no se tiene intención de ejecutar, y cuyo objetivo es provocar la reacción de otros operadores del mercado, lo que acaba moviendo el precio del mismo en la dirección que desea el manipulador.
Según Heath Tarbert, presidente de la CFTC, una agencia independiente del Gobierno estadounidense que vigila los mercados de futuros, “estas multas récord reflejan no solo nuestro compromiso de actuar con dureza contra quienes vulneran las reglas, sino también los enormes pasos que ha dado la agencia en materia de análisis de datos. Nuestra capacidad para investigar los listados electrónicos de órdenes de compra y revisar los mercados ha permitido a la CFTC no solo detectar malas actuaciones, sino también descubrir declaraciones falsas y engañosas”.
Los cargos presentados contra Scotiabank se derivan de una investigación criminal a que la agencia sometió a la división de metales preciosos del banco.
En la nota de prensa emitida, la CFTC explica que “la aplicación de estas medidas ha venido motivada por una conducta de manipulación y engaño que se ha extendido durante más de ocho años y ha incluido miles de ejemplos de intentos de manipulación y ‘spoofing’ en los contratos de futuros de oro y plata”.
Al parecer, cuatro traders de Scotiabank se dedicaban a colocar órdenes de compra y venta de contratos de metales preciosos, que luego cancelaban en el último momento. Se trataba de una maniobra destinada a manipular los precios del mercado de metales preciosos.
Según el Departamento de Justicia de los Estados Unidos, los traders en cuestión trabajaban desde sedes diferentes a Nueva York, Londres y Hong Kong.
El banco se ha comprometido a también a continuar cooperando con el Departamento de Justicia en todas las investigaciones que están en curso. Desde la entidad han señalado que “entendemos que, para mantener la confianza de nuestros accionistas, debemos adherirnos a los requerimientos regulatorios en materia de trading, así como a las políticas de ‘compliance’”.
El acuerdo se produce dos años después de que Scotiabank fuera sancionado con una multa por la manipulación de los mercados del oro y la plata. Según la CFTC, “el Banco de Nova Scotia fue multado con 800.000 dólares en 2018 por prácticas de ‘spoofing’ en los mercados de futuros del oro y la plata, pero las múltiples declaraciones realizadas por la entidad a miembros de la CFTC en el curso de esa investigación –en la que la agencia informaba sobre sus descubrimientos y sanciones– resultaron ser falsas, como se ha podido probar más adelante”.
A principios de año, Scotiabank hizo públicos sus planes de desmantelar su división de metales preciosos, para lo que dispuso un presupuesto especial de 232 millones de dólares, destinados a cubrir todos los posibles costes, incluyendo posibles multas y sanciones.