Diversos medios de comunicación asturianos y webs de entidades ecologistas del Principado informan sobre el permiso solicitado por la compañía minera Orovalle para iniciar labores de investigación para determinar la presencia de oro y plata en los concejos asturianos de Belmonte de Miranda, Tineo y Cangas del Narcea.
El proyecto previsto, bautizado como Teito, tendrá una duración de estudio de tres años, de los que el primero de ello la minera Orovalle llevará a cabo trabajos de cartografía, así como pequeños muestreos, para lo que prevé destinar una cuantía de 30.500 euros, del total de más de 1.200.000 euros previstos para completar el proyecto.
No será hasta el segundo año cuando la firma minera comience con pequeñas calicatas en las zonas de interés. Para este segundo ejercicio, la inversión estimada asciende a 396.400 euros, según publica ElComercio.es.
El tercer año estará condicionado a los datos de la cartografía y los resultados de la geoquímica de suelos, que abrirán la posibilidad de realizar una campaña de geofísica. Entonces se llevarían a cabo los primeros cálculos aproximados de recursos y una previabilidad del proyecto.
La canadiense Orovalle prevé el tratamiento del mineral en las instalaciones que ya posee en Begega-Boinás, en el concejo de Belmonte de Miranda. Además, según el proyecto, parte de los medios humanos necesarios correrán a cargo de la propia firma (28 trabajadores de perfil técnico) y “en otras ocasiones se subcontratará a terceros”, tal y como han hecho en otros trabajos similares.
Para esta última fase, la empresa deberá llevar a cabo sondeos de testigo para comprobar la continuidad de las posibles estructuras encontradas en las calicatas en profundidad. “Se plantean quince sondeos con recuperación de testigo”, señala el proyecto que también estima unas “2.500 muestras en las zonas que finalmente se consideren interesantes”.
Los sondeos y las calicatas previstos en la última fase del proyecto han desencadenado las críticas de la Coordinadora Ecoloxista, que denuncia que “la empresa quiere buscar más oro en la misma franja donde ya buscaron otras muchas en las últimas décadas, cosiendo Asturias a agujeros de sondeos, sobre los que el Principado no tiene ningún control”. Los ecologistas argumentan que el proyecto pretende quince sondeos “profundos de 400 metros de profundidad y calicatas que no se concretan cuántas van a ser”.
Según obra en la memoria de la firma canadiense, el personal técnico considera posible que la mineralización del denominado Cinturón de Río Narcea se pueda extender hacia el sur de Quintana, zona donde se llevará a cabo la investigación.
La geología de la zona es la perteneciente al cinturón del Río Narcea. De hecho, la zona está situada en un entorno geológico similar al del yacimiento del El Valle-Boinás. Sostienen que allí existen “dos tipos de mineralización de oro bien definidos”.
Por el momento y según publicó el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA), se abre el período de información pública para que los interesados que se opongan puedan realizar el trámite en treinta días hábiles.
La empresa Orovalle posee una plantilla propia de 448 empleados, siendo el 49% trabajadores de los municipios de Belmonte, Cangas de Narcea y Tineo, Allande, Salas, Grado y Boal.
La búsqueda se realiza sobre una superficie de 1,86 millones m2 con el nombre de permiso de investigación Valledor que promueve la mercantil Western Metallica, S.L. una intermediaria en busca de derechos mineros.
OroValle (cuya denominación social completa es Orovalle Minerals, S.L.) es una compañía minera que extrae y procesa mineral en Asturias, produciendo oro, cobre y plata. OroValle es una empresa filial de la canadiense Orvana Minerals Corp, empresa cotizada en la bolsa de Toronto bajo el símbolo ORV.
En la actualidad OroValle opera las minas de El Valle-Boinás en el concejo de Belmonte de Miranda, y la de Carlés, en el concejo de Salas. Además de las concesiones de explotación, la compañía cuenta con permisos de investigación en los tres cinturones auríferos de Asturias, trabajando permanentemente en el estudio de recursos minerales que puedan convertirse en el futuro en yacimientos en explotación.