Tanto Forex como Reuters coinciden en que los mercados de oro cerraron al alza durante la sesión del pasado viernes 14 de julio, y finalmente rompieron por encima del nivel de 1.230 dólares la onza, debido a los datos de inflación de Estados Unidos más bajos de lo esperado, lo que generó la posibilidad de que la Reserva Federal no estará dispuesta a elevar las tasas de interés de manera inmediata.
La coincidente debilidad del dólar ha impulsado a la onza de oro a posicionarse al alza, de tal manera que el lunes 17 de julio el London Bullion Market señalaba un cierre de mercado a 1.234,10 dólares la onza de oro físico, mientras que la mañana del martes 18 de julio abría con tres dólares más de aumento, es decir 1.237,10 dólares, y cerraba a 1.240,75 dólares, ganando casi seis dólares de un día para otro.
¿Cuál puede ser la tendencia para emplazar la última semana completa de julio? Si observamos los movimientos de mercado producidos desde el pasado 10 de julio, el resultado es el de subidas continuadas, lentas, sin sustos, que arrancaron ese lunes desde los 1.207,55 dólares onza, con una ganancia hasta la fecha de 30 dólares en una semana y dos días.
Claro que a la pregunta de ¿cómo cerrará el oro el mes de julio?, se pueden valorar tres opciones: la primera, la de seguir la línea ascendente y finalizar el caluroso mes con una cifra similar a la que cerró junio, es decir 1.242 dólares la onza; la segunda opción, podría ser la de afrontar agosto con un aumento mucho mayor, tal y como ocurrió el pasado año; la tercera opción se enmarcaría en una fijación desacelerada hacia los 1.220 dólares.
Lo que no hay que olvidar es que, tradicionalmente, agosto marca el comienzo de la recuperación para el oro y es un buen momento para posicionarse y comprar pensando en las subidas que vendrán después otoño, sobre todo antes de Navidades.