El precio del platino cayó el lunes 2 de julio más de un 5% para tocar los 811,10 dólares la onza en los mercados de futuros de Nueva York. Su precio actual es el más bajo desde julio de 2004. La causa de la caída: la menor utilización como uso industrial en el mundo del automóvil.
El platino también está operando no muy lejos de un descuento récord sufrido en el paladio, que se fijó en 938 dólares la onza.
El alejamiento de los motores de combustión interna, particularmente los vehículos a diesel, está reduciendo la demanda a largo plazo del metal precioso. De manera más inmediata, la probabilidad de una guerra comercial a gran escala por los automóviles, entre los EEUU y Europa, ha visto a los fondos de cobertura abandonar en masa el metal utilizado ampliamente en la industria.
En los mercados de derivados, tanto los inversores como los fondos de cobertura, han reducido las apuestas alcistas en platino a mínimos históricos.
El mercado de autocatalizadores representa más del 40% de la demanda de usuarios finales de platino y los fabricantes de automóviles europeos, donde el diesel compone alrededor del 50% del mercado (pero como porcentaje de nuevas ventas se ha desplomado), son los principales consumidores industriales de platino.
Mientras el paladio encuentra su aplicación industrial principalmente en los motores de gasolina, el platino es el depurador de emisiones preferido en los motores diesel. Esta tecnología ha estado bajo una presión implacable desde las revelaciones de septiembre de 2015 de que Volkswagen, el segundo fabricante de vehículos del mundo, había hecho trampa en las pruebas de emisiones.
Las amenazas de aranceles sobre las importaciones de vehículos por encima de los aranceles de acero y aluminio ya impuestos por Estados Unidos a la UE tendrían un efecto inmediato en la demanda de platino. El bloque europeo exportó 43,6 mil millones de dólares en automóviles a los Estados Unidos en 2017, mientras que 7,2 mil millones de dólares en automóviles hicieron el viaje contrario.
Juntos, Rusia y Sudáfrica controlan entre el 70% y el 80% del suministro mundial de platino. La organización estatal de almacenamiento de Rusia, llamada Gokhran, se encuentra en una cantidad no revelada de paladio acumulado durante la era soviética, que lanza al mercado de vez en cuando (algunos dicen que ya se ha agotado).
La estructura del suministro no ha cambiado de manera sustancial desde la década de 1970, cuando el platino y el paladio se convirtieron en una parte importante de la industria automovilística mundial.
Aunque hay otro gran peligro que se cierne sobre el platino para uso industrial: la aparición de los vehículos eléctricos.