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Sudán exportará más oro para financiar la compra de productos básicos

Mina de oro de Hassai (Sudán)

El Gobierno de Sudán contempla en sus presupuestos para el año 2022 el aumento de sus exportaciones de oro para financiar la compra de productos esenciales. Una decisión de emergencia que se ha tomado para suplir las ayudas económicas internacionales que diversos países han retirado tras el golpe de estado que se produjo en el país africano, uno de los mayores productores de oro del continente.

Según ha informado la agencia Reuters, Sudán incrementará sus exportaciones de oro con el objetivo de cubrir las ayudas económicas internacionales que fueron retiradas tras el golpe de estado del pasado 25 de octubre, que puso fin a la transición democrática iniciada en el país en 2019.

El estado africano ha dejado de percibir miles de millones de dólares en ayudas procedentes de países extranjeros después del golpe de estado de los militares del pasado octubre, que acabó con el sistema de reparto de poderes con los civiles establecido tras el derrocamiento en 2019 del anterior presidente Omar al-Bashir.

Según las nuevas normas aprobadas por el Gobierno de Sudán y comunicadas por el ministro de Finanzas, el 70% de los fondos obtenidos con las exportaciones de oro se utilizarán en la compra de “bienes estratégicos”, entre los que se encuentran combustible y trigo, y el resto en “bienes necesarios”.

También se han aprobado otras normas destinadas a reducir el tiempo y las comisiones aplicadas en el proceso de exportación del oro.

Sudán es uno de los mayores productores de oro de África. Según los datos de su banco central, en los nueve primeros meses de 2021 exportó 26,4 toneladas de oro, superando las 25,2 toneladas de metal que se habían exportado durante todo el año 2020.

El problema es que, según las estimaciones del Gobierno, la cantidad de oro que sale de contrabando del país es cuatro veces mayor que las exportaciones oficiales.

El presupuesto aprobado hace unos días pretende aumentar en un tercio los gastos y los beneficios y prevé un déficit de 363.000 millones de libras sudanesas (unos 827 millones de dólares).

Desde que se produjo el golpe de estado del 25 de octubre de 2021, la libra sudanesa ha caído en comparación con el dólar, pasando de 445 a 495 por cada billete verde.

Los partidos civiles de la oposición han acusado a los líderes militares de acabar con los beneficios económicos y sumir al país en una nueva crisis. De momento, Sudán dejará de percibir ayudas económicas desde el extranjero que, en todo el año 2021, representaron 839 millones de dólares.

Los países occidentales y las instituciones financieras internacionales ya han dejado claro que las ayudas solo se reanudarán cuando exista de nuevo un gobierno liderado por civiles.

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