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The Royal Mint acuña una criticada moneda conmemorativa de la boda real

La Casa de la Moneda de Gran Bretaña, The Royal Mint, ha presentado la nueva moneda conmemorativa, en oro y plata, de la boda del príncipe Henry con Meghan Markle, que se celebra el 19 de mayo en la Capilla de San Jorge del Castillo de Windsor.

La moneda conmemorativa del enlace del príncipe Henry con la norteamericana Meghan Markle, en sus versiones de oro y plata, está acuñada en tipo corona, que es el modelo con el que The Royal Mint celebra tradicionalmente los hechos destacados en la vida de la Familia Real británica.

Ambas versiones están acuñadas en calidad prueba y cuentan con el mismo valor facial: cinco libras esterlinas. La de oro está acuñada en metal de 22 quilates (91,6% de pureza), con aleación de cobre, lo que le da un color rojizo similar al de otra moneda de oro de 22 quilates bien conocida: el krugerrand.

Su peso es de 39,94 gramos, y su diámetro de 38,61 milímetros. La emisión está limitada a 1.000 unidades, 850 de las cuales se presentan en un estuche especial.

La otra versión está acuñada en plata de 925 milésimas, con 28,28 gramos de peso y el mismo diámetro, 38,61 milímetros, ya que ambas están acuñadas en formato corona. De la versión de plata se van a acuñar un máximo de 16.000 piezas, 15.000 de las cuales se presentan en un estuche especial.

También está previsto que se acuñe una versión especial de la moneda de plata, en piedfort (de grosor doble), de la que solo saldrán 2.018 unidades.

En esta ocasión, The Royal Mint ha dejado el diseño en manos de uno de sus grabadores más destacados, Jody Clark. Para elaborarlo, la Casa Real organizó una sesión fotográfica en el Palacio de Kensington, poco después del anuncio oficial del compromiso entre ambos. En las imágenes trataron de captar la complicidad entre ambos, para dar lugar a un moderno diseño, que es el que Jody Clark ha plasmado en el reverso de esta moneda.

La imagen central muestra a la pareja casi de perfil, mirándose a los ojos, mientras Meghan apoya sus manos en el brazo de su prometido. La imagen central está rodeada por la leyenda “Harry & Meghan – Royal Wedding – 19 May 2018”.

Un diseño que, por cierto, no ha estado exento de polémica en el Reino Unido, ya que ha habido numerosas críticas a la imagen de Harry y Meghan, por su escaso parecido y por lo que algunos consideran que es un diseño caricaturaesco más que realista.

Críticas que, por otro lado, recuerdan a las que tuvieron lugar cuando The Royal Mint acuñó la moneda conmemorativa de la anterior boda real, la del príncipe William Catherine Middleton, también muy criticada por su escaso parecido.

El anverso es el habitualmente utilizado por The Royal Mint, con el último retrato de la reina Isabel II realizado por Jody Clark, cuya versión para las monedas de Australia ha despertado recientemente la controversia en este país.

A su alrededor figura la leyenda habitual: “Isabel II, por la Gracia de Dios, Reina y Defensora de la Fe”, así como el valor facial, cinco libras esterlinas.

Al margen del diseño, también el precio ha suscitado intensas críticas, al igual que sucedió con la moneda conmemorativa de la boda de William y Catherine. Y es que The Royal Mint ha fijado el precio de la moneda de oro en 1.980 libras esterlinas (2.700 dólares) y el de la moneda de plata en 82,50 libras (112,5 dólares).

A efectos comparativos, la Britannia de plata de 2018, que contiene una onza de plata de 999 milésimas, puede conseguirse por menos de 25 dólares.

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