En poco más de un mes, el mercado del oro de Nueva York ha pasado de una situación de alarmante falta de suministro a contar con un excedente masivo de oro físico. Las distorsiones provocadas por el Covid-19 en la actividad de las refinerías y en los transportes internacionales han alterado la cadena de suministros, creando una nueva situación que podría afectar a la evolución del precio del oro.
Como explican desde Kitco News, el mercado del oro de Nueva York se encuentra ahora mismo en un estado de saturación provocado por un exceso de suministro de oro físico a los bancos, que no van a necesitar tanto como creían hace apenas unas semanas.
El pasado mes de marzo, con el comienzo de las medidas de confinamiento dictadas en numerosos países para combatir el avance de la pandemia de Covid-19, el mercado del oro se vio afectado por la interrupción de su cadena de suministros.
Desde ese momento, los depósitos del COMEX (el mercado del oro de Nueva York, en el que se negocian contratos de futuros) comenzaron a llenarse hasta alcanzar unos niveles récord.
Según los últimos datos de CME (compañía que gestiona el COMEX), desde finales de marzo se recibieron más de 16,8 millones de onzas (522,5 Tm). Los últimos datos apuntan a la existencia de más de 26 millones de onzas (809 Tm) de oro en sus cámaras acorazadas.
Incluso la autr
Un auténtico ‘atracón de oro’, que se ha visto confirmado esta misma semana por los datos publicados por la Administración Federal de Aduanas de Suiza y reflejados por Oroinformación, que muestran que este país exportó 131,8 toneladas de oro en abril, su cifra más alta desde agosto de 2019, la mayor parte de las cuales (111,7 Tm) fueron a parar a los Estados Unidos.
Hasta el momento, EEUU promediaba menos de 2 toneladas mensuales de oro importado desde Suiza en el periodo 2014-2019, que se han disparado hasta más de 111 el pasado mes.
En opinión de Ole Hansen, analista de commodities de Saxo Bank, este excedente de oro que se ha acumulado en el mercado estadounidense no es ninguna sorpresa, teniendo en cuenta los importantes problemas de suministro a los que se ha enfrentado aquél durante el pasado mes de marzo.
Sin embargo, a día de hoy constituye un problema que hay que resolver: “siempre es mejor tener demasiado oro a que te pillen sin él, pero eso demuestra la enorme fragilidad de la cadena de suministro”, advierte Hansen.
Según este analista, además de este exceso de suministro, el mercado tiene también otras dificultades, como los persistentes problemas de liquidez, ya que los bancos se han mostrado reacios a desempeñar el papel de mediadores en los mercados físicos.
Durante el mes de marzo, numerosos bancos de los que participan en el mercado del oro (los llamados ‘bullion banks’) se quejaron de problemas de liquidez en el mercado físico, causados por la situación originada por la pandemia de Covid-19.
El principal problema radicaba en el mercado EFP (de intercambio de futuro por oro físico), que permite a los traders mover sus posiciones de futuros desde el oro físico. Su actividad se vio dificultada por el hecho de que no había suficiente oro en el formato adecuado para satisfacer la creciente demanda en ese mercado.
“Los bancos se vieron muy afectados y perdieron el apetito por el oro físico. De momento, no parece que vaya a volver aún el mediador”, opina Hansen.