La producción de oro de Turquía alcanzó la cifra más alta de su historia con 42 toneladas extraídas en 2020, según los datos publicados por el Ministerio de Energía y Recursos Naturales del país. La República de Turquía comenzó a extraer oro en 2001.
La producción de oro de Turquía alcanzó las 42 toneladas en el año 2020, la cifra más alta desde que comenzó a extraerse el metal precioso en el país, en el año 2001.
Según informó Fatih Donmez, ministro de Energía y Recursos Naturales, en una reunión con la Asociación de Mineros Turcos, las 42 toneladas de metal extraídas el pasado año en Turquía han contribuido con 2.400 millones de dólares a la economía del país.
La cifra de 2020 supera a las 38 toneladas extraídas en 2019, que era la cifra más alta alcanzada por la minería de oro del país hasta el momento.
Según la información facilitada por el Ministerio, Turquía ha invertido hasta la fecha más de 6.000 millones de dólares en el sector del oro, que en la actualidad emplea a más de 13.200 trabajadores.
El país es un recién llegado entre los productores de oro, ya que no inició la extracción del metal precioso hasta el año 2001, en que produjo la modesta cantidad de 1,4 toneladas de oro.
Durante los 20 años transcurridos desde entonces, el país ha extraído 382 toneladas de metal, que han permitido al país obtener beneficios derivados de impuestos equivalentes a 76 toneladas de oro.
Turquía quiere fomentar la producción nacional de oro para reducir la enorme factura anual que suponen las importaciones de este metal para abastecer al activo sector joyero del país.
Según los datos ofrecidos por el ministro de Energía y Recursos Naturales, durante 2020 Turquía importó oro por valor de 25.200 millones de dólares, un 123% más que el año anterior.
El objetivo del Gobierno es que Turquía llegue a producir el equivalente a la mitad de sus importaciones de oro, lo que permitiría ahorrar más de 12.500 millones de dólares anuales.
En la actualidad, existen 18 minas de oro operativas en Turquía, mientras que otros 20 proyectos permanecen a la espera de financiación. Cuando se pongan en marcha, el Gobierno espera aumentar la producción hasta las 100 toneladas, lo que reduciría el déficit comercial provocado por las importaciones y aumentaría el número de trabajadores en el sector.
La mayor de las minas operativas de Turquía es la de Kisladag (en la imagen, fundición del oro extraído en esta mina), operada por la compañía canadiense Eldorado Gold.
El oro resulta fundamental para la economía turca. Su banco central es uno de los más activos en la compra de oro para sus reservas, que a cierre del mes de noviembre alcanzaban las 547 toneladas, que representan el 42% de sus reservas en divisas.