El Gobierno de Turquía estudia imponer un depósito obligatorio de 500 gramos de oro a cada uno de los joyeros que operan en el país. La impopular medida es una de las fórmulas que ha estudiado el Ministerio de Comercio para recaudar fondos adicionales para la maltrecha economía del país.
El Gobierno turco tiene claro desde hace tiempo que el oro es una de las soluciones a la crisis que afecta a su economía y que ha provocado la devaluación de su divisa local, la lira turca. No en vano, el Banco Central de la República de Turquía suele estar entre los que más oro adquieren al mes durante los últimos años.
A finales del pasado enero, este organismo contaba con unas reservas de 526,9 toneladas de oro, que representaban el 37,1% de sus reservas estratégicas.
Sin embargo, la situación económica del país ha obligado el Gobierno a considerar medidas más drásticas, también relacionadas con el oro. Según informa el diario turco Ahval, el Gobierno de Erdogan está estudiando obligar a los joyeros a que realicen un depósito de oro en los bancos estatales, para recabar fondos adicionales para la economía.
El proyecto elaborado por el Ministerio de Comercio establece que cada joyero deberá depositar 500 gramos de oro (cuyo valor de mercado, a día de hoy, es de 27.895 dólares) en los bancos estatales.
Con esta medida, el total de oro recogido sería de alrededor de 20 toneladas, con un valor de unos 8.400 millones de liras turcas (1.100 millones de dólares).
Desde la oposición al Gobierno, el diputado del Partido Popular Republicano, Özcan Aygun, ha señalado que la medida recuerda a los impuestos que tenía que soportar la población en la época del Imperio Otomano.
El oro estará depositado como garantía y no será devuelto a los joyeros, aunque éstos se podrán beneficiar de los intereses que genere su depósito.
Como es lógico, la medida no ha sido bien recibida por el colectivo de joyeros. Hasan Çavuşculu, representante de una asociación de comerciantes de joyería y relojeros de la capital, Ankara, ha pedido al Gobierno que reconsidere su idea y que negocien un acuerdo intermedio.
Turquía cuenta con un importante sector joyero, en el que trabajan alrededor de 40.000 profesionales. Según el último informe Gold Demand Trends, publicado por el Consejo Mundial del Oro, la demanda de metal por parte del sector joyero turco se redujo un 30% durante el pasado año.
La joyería turca no experimentó un impulso en el último trimestre del año, como sí sucedió en países como China y la India: su demanda fue un 25% inferior a la del cuarto trimestre de 2019.
Parte de la responsabilidad de esta situación la tiene el estado de la economía del país, que ha sufrido una importante devaluación de la moneda local, la lira turca, entre agosto y principios de noviembre de 2020, lo que ha provocado una subida del precio del oro en liras turcas hasta su máximo histórico, un 86% en el conjunto del año.