El Gobierno de Uzbekistán quiere hacer del oro una de las principales fuentes de ingresos del país, mediante la explotación y desarrollo de sus abundantes regiones mineras, hasta convertirlo en uno de los cinco mayores productores mundiales de este metal.
Según publica el medio especializado en minería Resource World Magazine, Uzbekistán quiere convertirse en uno de los mayores productores de oro durante los próximos años.
Los últimos datos publicados por el Comité de Geología del Estado Uzbeko, el país cuenta en la actualidad con 63 grandes áreas con mineral de oro, que contienen conjuntamente unas reservas totales de más 2.500 toneladas de oro y unas reservas probables de unas 5.990 toneladas.
De estas 63 áreas, al menos nueve se encuentran actualmente en fase de desarrollo, un número que se va a ir incrementando a corto plazo.
El desarrollo de estos planes forma parte de la orden dada el año pasada por el presidente uzbeko, Shavkat Mirzeev, al Gobierno del país, de incrementar la producción de oro y plata del país, hasta duplicar las cifras actuales entre 2021 y 2022.
La producción de oro de Uzbekistán fue de 89,9 toneladas en 2017 y 88,5 en 2019, cifra que se espera incrementar a corto plazo por encima de las 100. El país ocupa el decimosegundo puesto entre los mayores productores mundiales de oro.
Según explican desde Resource World Magazine, el desarrollo de la industria minera del oro se gestó a finales de la década de los 60 del pasado siglo, cuando el entonces Gobierno soviético dio luz verde al desarrollo de la mina de Muruntau, una de las explotaciones con mayores reservas de oro del mundo.
Tras el colapso de la Unión Soviética, la mayoría de estos proyectos quedaron abandonados y solo se han reanudado en los últimos años, cuando el Gobierno de Uzbekistán anunció sus planes de invertir 750 millones de dólares, la mayor parte de ellos procedentes de fondos públicos, en el desarrollo de Muruntau.
La mina de Muruntau (en la imagen) está situada en las montañas de la región de Navoi, al sudoeste del desierto de Kyzyl Kum. Fue descubierta en 1958 y su desarrollo comercial comenzó en julio de 1969. En su momento fue la mina a cielo abierto más grande del mundo, con una longitud de 3,5 kilómetros, una anchura de 2,7 y una profundidad de 600 metros.
La mayor parte del oro se produce en las plantas operadas por Navoi Mining and Metallurgical Combine (NMMC), de las que sale alrededor del 70% de la producción del país.
Los planes del Gobierno de Uzbekistán pasan por el desarrollo de la mina de Muruntau, utilizando la capacidad de procesamiento de NMMC, para alimentar las reservas de oro del país. Desde 1991, las cuatro plantas de NMMC han triplicado el volumen de mineral procesado, mientras que la producción de oro se ha incrementado en casi un 40%.
Inversores extranjeros
El desarrollo de Muruntau y otras áreas de explotación van a implicar la participación de inversores extranjeros. El Gobierno uzbeko tiene especial interés en atraer a inversores procedentes de Canadá.
Una de ellas es la minera B2Gold Corp, con sede en Vancouver, que ya ha anunciado su intención de realizar exploraciones geológicas en tres posibles depósitos de oro de la región de Navoi. La compañía no ha descartado la posibilidad de comenzar a explotar comercialmente el oro de Uzbekistán, una vez concluida la fase de exploración.
Desde el Gobierno uzbeko esperan que la entrada de socios internacionales introduzca las tecnologías más modernas de extracción de oro en el país, permitiendo que las mineras locales se aprovechen de ello para dar el salto adelante que necesita la industria.
El objetivo que se ha fijado el Gobierno uzbeko es seguir aumentando sus reservas de oro. Una política, siguiendo la estela de Rusia, que lleva practicando durante los últimos años.
Según los últimos datos publicados por el Consejo Mundial del Oro, correspondientes al mes de junio, el Banco Central de la República de Uzbekistán acumula 342,8 toneladas de oro, que representan el 60% de sus reservas estratégicas.
El objetivo del Gobierno es aumentar estas reservas hasta las 474 toneladas, valoradas en 18.750 millones de dólares, en el plazo de cinco años.
De momento, el oro sigue siendo uno de los principales productos de exportación desde Uzbekistán. La mayor parte del metal se exporta en dirección a Suiza.