Venezuela aspira a firmar un acuerdo de colaboración con Rusia para que este país aporte su tecnología y experiencia en la explotación de algunas minas de oro y carbón situadas en territorio venezolano.
Según ha informado la agencia oficial rusa Tass, el ministro de Industrias y Producción Nacional de la República Bolivariana, Tarek El Aissami, declaró que “queremos que Rusia participe en la exploración y extracción de oro y coltán en nuestro país. Venezuela está cerca de concluir el proceso de certificación que confirme su estatus como el país con los segundos o terceros mayores yacimientos de oro del mundo”.
El ministro avanzó a la agencia rusa que se espera firmar el acuerdo el próximo 13 de diciembre y añadió que Caracas y Moscú van a continuar desarrollando esta cooperación estratégica, “una cooperación destinada a proteger nuestros recursos e intereses nacionales”.
Este acercamiento del Gobierno de Venezuela a Rusia se produce poco después de que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, dictara una orden ejecutiva imponiendo una serie de sanciones sobre el comercio de oro de Venezuela.
Unas sanciones motivadas por las exportaciones de oro venezolano a Turquía, que han servido para aliviar la situación económica del país, que también estaba sujeto a sanciones por parte del Gobierno de los Estados Unidos. En concreto, Venezuela ha exportado 23,62 toneladas de oro, valoradas en unos 900 millones de dólares, en los nueve primeros meses del año.
Todo hace pensar que Venezuela está buscando un aliado poderoso que le ayude a rentabilizar los recursos mineros, que tanta falta le hacen para aliviar su situación económica.