La compañía automovilística BMW ha utilizado pintura de oro de 24 quilates para decorar dos de sus modelos, con el objetivo de subastarlos para dotar unos premios a la divulgación científica.
Los dos modelos “chapados” en oro son un BMW i3 y un BMW i8, que forman parte de una serie que la firma alemana ha denominado Starlight Edition. En concreto, los vehículos han sido diseñados por la división checa de BMW, junto con Liebscher Blattgold GmbH, una firma alemana especializada en revestimientos de oro.
El diseño ha contado también con la colaboración del pintor checo Miroslav Spicák y del diseñador Zoltán Matuska.
Los dos vehículos cuentan con un revestimiento de oro de 24 quilates, aplicado en cuatro capas que se superponen a las seis con las que habitualmente se pintan estos automóviles. Este revestimiento de polvo de oro cubre aproximadamente la mitad de la superficie de ambos automóviles, que cuentan con un acabado negro que conjunta a la perfección con el dorado.
Pero la pintura de oro no se limita al exterior: el interior está provisto de diversos acabados en oro, como la pieza central del volante.
Este lujoso acabado hace que se trate de dos vehículos exclusivos y destinados a coleccionistas, que tendrán que pujar, con un precio de salida aún no revelado por BMW, en una subasta cuyos fondos se destinarán a sufragar los premios VIZE 97 Prize, destinados a la divulgación científica y otorgados por la Fundación de Dagmar y Václav Havel, de la República Checa.