Existen numerosas minas de metales preciosos que fueron abandonadas pero que aún pueden ser aprovechables. En su momento, la imposibilidad de acceder con las herramientas de la época a la profundidad necesaria para extraer los metales o el alto coste económico que comportaba su explotación hicieron que los mineros las abandonaran, ya que la actividad no resultaba rentable desde el punto de vista económico. Ahora, con la subida de los metales preciosos y la evolución de la tecnología minera, muchas de estas minas ‘zombi’ están volviendo a la vida.
Una de ellas, como informa Bloomberg, es la mina de plata de Vares (en la imagen), situada en Bosnia-Herzegovina, que fue abandonada a principios de la década de los 90 del pasado siglo, cuando comenzó la llamada Guerra de los Balcanes, tras casi cuatro décadas de actividad.
La mina va a volver a ser explotada por la compañía minera británica Adriatic Metals, aprovechando la reciente subida del precio de la plata, que ha vuelto a hacer rentable desde el punto de vista económico la extracción de las reservas minerales de la misma.
La explotación comenzará a funcionar a finales de 2022, tras más de 30 años parada, según ha confirmado el CEO de Adriatic Metals, Paul Cronin, quien también se ha referido a esta tendencia: “algunas de estas antiguas minas abandonadas que existen por todo el mundo constituyen un problema, tanto de apariencia como desde el punto de vista medioambiental, que hay que afrontar. Si somos capaces de transformar una mina ‘zombi’ en algo que puede añadir valor, que resuelva estas cuestiones y que ofrezca retribución a los accionistas, será fantástico”.
Desde Europa a Australia, pasando por Sudáfrica, las compañías mineras se están viendo beneficiadas por la subida del precio de los metales preciosos propiciada por la recuperación de la economía global y por el aumento del gasto en infraestructuras vinculado a la transición hacia unas energías limpias.
Esto ha provocado un renovado interés por algunas minas que actualmente están inactivas. Hay más ejemplos como el de la mina bosnia de Vares: la compañía minera sudafricana Anglo American Platinum, la mayor productora mundial de platino, ha recibido ofertas de varios grupos inversores que quieren hacerse con los derechos de explotación de la mina de Bokoni.
Según el CEO de Adriatic Metals, la ventaja de reciclar antiguas minas, aunque hayan estado inactivas más de 30 años, es que se pueden ahorrar costes aprovechando las infraestructuras existentes. En el caso de la mina de Vares, Adriatic ha aprovechado los raíles y carreteras que rodean a la explotación, además de algunas instalaciones de la antigua mina, incluyendo las líneas eléctricas.
Las nuevas tecnologías pueden contribuir también a que estas operaciones abandonadas sean económicamente rentables.
De momento, esta tendencia no ha tenido demasiado impacto en el mercado, ya que las minas que se han vuelto a poner en actividad han sido las más pequeñas.
Según Gavin Wendt, director de la consultora MineLife, “muchas de estas operaciones se sitúan en el punto más alto de la curva de costes, por eso no se encuentran actualmente en fase de producción. Eso nos indica que son bastante marginales y, por lo tanto, muy vulnerables a las oscilaciones en los precios de las commodities. Pese a ello, si existen infraestructuras en pie, reanudar la actividad de una mina es una estrategia de bajo riesgo si la comparamos con el desarrollo de nuevos proyectos”.
El precio de la plata se ha incrementado en cerca de un 40% durante los últimos 12 meses y su demanda para la fabricación de paneles solares y puntos de recarga de vehículos eléctricos está aumentando, lo que constituye una garantía para las mineras que aborden la tarea de resucitar minas ‘zombi’.