La empresa suiza de servicios relacionados con los metales preciosos MKS y la refinería PAMP han anunciado su fusión, que reforzará la capacidad del grupo aumentará el valor añadido para los socios y accionistas, y reafirmará el compromiso de ambas empresas con las prácticas responsables en el mercado del oro.
MKS Suiza, la empresa de servicios relacionados con los metales preciosos, y PAMP, la compañía líder en el sector del refinado y fabricación de lingotes, han anunciado su fusión, que dará origen a MKS PAMP.
Según ambas compañías, la operación va a reforzar la capacidad del grupo, aumentará el valor añadido de cara a los socios y accionistas de ambas y reafirmará el compromiso de estas empresas con las prácticas responsables.
MKS PAMP permitirá reunir en una sola compañía las actividades de refinado, fabricación de lingotes y servicios de trading, en una oferta conjunta, uniendo el conocimiento del sector financiero y comercial que tiene MKS, con la experiencia industrial de PAMP, para satisfacer mejor las nuevas necesidades de los consumidores.
Ambas compañías esperan desarrollar importantes sinergias en términos de ofertas y operaciones conjuntas.
La empresa resultante contará con más de 260 empleados en Suiza y tendrá sedes en Ginebra y en el cantón italoparlante del Tesino, donde se asientan las principales refinerías de oro mundiales. Ello permitirá consolidar el impacto económico en la region.
El Consejo de Dirección ha nombrado a Marwan Shakarchi como director. Shakarchi ocupaba el puesto de CEO de MKS y presidente del Consejo de Dirección de PAMP. La presidencia de PAMP ha recaído en Karma Shakarchi-Liess.
En palabras de Marwan Shakarchi, “nuestros valores familiares nos han impulsado constantemente a superarnos para alcanzar los más altos niveles como equipo y a empezar un nuevo capítulo hoy. Hoy, más que nunca, estamos comprometidos con el camino de la sostenibilidad y con la promoción de prácticas responsables y la elaboración de productos de calidad, tanto para hoy como para la generación del mañana”.
La marca y el característico sello de PAMP seguirán luciendo en los lingotes fabricados por la refinería, mientras que la nueva compañía liderará las iniciativas de la industria internacional, trabajando junto a sus socios para definir los más estrictos códigos de conducta del sector.
La sostenibilidad ha formado parte de este negocio familiar desde su fundación en 1979. Su objetivo desde el principio ha sido la creación de productos y servicios de última generación,
De cara al futuro, el objetivo es incorporar valor añadido a sus productos y servicios, respetando sus compromisos con la transparencia y los estándares de responsabilidad corporativa.
Para el año 2030, la compañía quiere reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de sus centros y cadenas de suministro, de acuerdo con los objetivos del Acuerdo de París.